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Fomentar la participación de los visitantes de la web en las reflexiones de la Fundación se conviuerte en el motivo fundamental para la puesta en marcha de esta iniciativa de diálogo, debate y pensamiento a través de las nuevas tecnologías.
 
 
     
31/10/2015 | Kategoria: DISCURSO | Egilea: DISCURSO EIDER GARDIAZABAL RUBIAL | 0 Iruzkizunak
DISCURSO EIDER GARDIAZABAL RUBIAL
Discurso de Eider Gardiazabal Rubial, Presidenta de la Fundación Ramón Rubial en el acto conmemorativo del nacimiento de Ramón Rubial, celebrado hoy Sàbado en la escultura de la Puerta de los Honorables.


Buenos días compañeras y compañeros,

Muchas gracias por acudir a la invitación de la Fundación Ramón Rubial para conmemorar el aniversario del nacimiento de mi abuelo.

Como presidenta, y también como nieta, me gustaría que esta tradición de reunirnos año tras año junto a su escultura no se convirtiera en una monótona obligación.

Como presidenta de la Fundación, quiero que este día se consolide como una oportunidad para apearse unos momentos del frenético ritmo de vida que nos impide ver el paisaje que nos rodea, y poder reflexionar juntos de política, de manera sosegada, haciendo un alto en el camino.

Lo considero una necesidad, pues la agitada agenda política que tenemos todos no nos permite tener reflexiones pausadas, tan necesarias para afrontar los grandes retos existentes.

Como sabéis, mi abuelo, se caracterizaba por medir muchos sus palabras y cuando lanzaba un mensaje, marcaba con firmeza su posición. Todos admirábamos, (y lo seguimos haciendo) su integridad y sensatez.

Sin duda, puedo confesaras que el secreto de su receta, se basaba en la capacidad de reflexión.

Mi abuelo sabía escuchar, amaba la lectura y cultivaba con calma su posicionamiento político usando las semillas del entendimiento, la comprensión y la reflexión ponderada.

Hoy hubiese cumplido 109 años y si viviera, seguro que no soportaría algunos de los debates políticos que se ven en televisión, por su mediocridad de argumentos y por la crispación de sus diálogos.

Tampoco se fiaría de las redes sociales como motor de la agenda política, porque no buscan los asuntos trascendentales de la política, aquellos que cambian las condiciones de vida de los ciudadanos y vertebran con firmeza una sociedad para afrontar los cambios del futuro.

No, la televisión, las redes sociales son potentes instrumentos de comunicación pero que siguen dinámicas contrarias a la reflexión política, amigas de la polémica insignificante, del cotilleo irrelevante, del eslogan sin argumento que no aporta nada, que no construye.

Así, descubres por ejemplo, cómo la dramática tragedia de los refugiados sirios va perdiendo importancia con el paso de los días, aunque el problema se sigue agravando día a día más y más. En el mediterráneo siguen muriendo personas, se siguen produciendo imágenes dantescas, vergonzosas, pero ya no son portada.

Y encima tenemos que escuchar a demasiadas voces europeas defender la xenofobia, la insolidaridad, la ilegalidad y la mentira con total descaro. Para combatir todo eso nació la fundación. Para luchar contra el olvido, contra la xenofobia, contra la indiferencia y también para pararse a pensar.

Porque la Fundación Ramón Rubial quiere convertirse en un espacio político diferente, un contrapeso sereno, reflexivo frente a la locura de titulares sin sentido.

Por eso, todas nuestras actividades van enfocadas a proporcionar un espacio de reflexión, a los más pequeños por ejemplo, para que a través del concurso de cuentos descubran aquellos valores y principios que son cimientos fundamentales de la sociedad que queremos.

Y por eso también organizamos conferencias, encuentros, mesas redondas para poder escuchar la opinión de expertos en diferentes ámbitos que conforman la gestión de lo público, con el afán de enriquecer el debate con información veraz y con opiniones relevantes.

Los problemas de una sociedad compleja, como la que tenemos, debilitada por los estragos de la crisis, desafiada por la emergencia de los refugiados, enfrentada por el debate catalán no pueden ser solucionados a la velocidad del twitter.

No es difícil comprender que, por ejemplo, para hacer un buen bacalao al pil-pil, es recomendable hacerla con buenos ingredientes claro, pero sin olvidar la calma de la cocina bien hecha. El fuego lento es un elemento clave para la buena cocina y para la buena política.

Por ello, me gustaría cerrar esta bienvenida con una invitación a la pausa para reflexionar, para tomar un impulso de sensatez previo a la acción, y espero que la Fundación Ramón Rubial sea la herramienta que nos brinde siempre ese espacio para pensar y que nos proporcione ocasiones como la de hoy para escuchar las reflexiones de nuestra Secretaria General, Idoia Mendia.

Muchas gracias por acompañamos un año más.
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